domingo, 23 de junio de 2013

Desayuno con Escorpiones


Aunque en algunos regiones de Latinoamérica y otras partes del mundo se incorporan insectos en la gastronomía, la verdad es que a la mayoría de personas la idea de comer larvas, grillos, escorpiones y demás bichos no es muy agradable que digamos.  Tal vez los asiáticos y africanos allí nos llevan la delantera a la mayoría pues para ellos la entomofagia, ingesta de insectos, arácnidos y artrópodos, está a la orden del día y tiene un valor nutricional importante en sus dietas. En el futuro cercano lo más probable es que todos debamos incorporar insectos y arácnidos a nuestra dietas para poder alimentarnos de una forma más efectiva y económica. Pues aunque estos bichitos se ven desagradables, son muy ricos en proteínas, grasas, fibras y vitaminas y tal vez sean una solución asequible para alimentar a la creciente población mundial y compensar por la falta de recursos y alimentos.

Cuando visité Beijing, años atrás, tuve la oportunidad de probar insectos en el mercado de Donghuamen.  Para mi fue una aventura y me atreví a probar escorpiones, saltamontes y culebras, entre otras cosas, por pura curiosidad y a pesar de que sabía de su rico valor nutritivo créanme que no me moría por degustarlos. Al final, no estuvieron mal; de hecho sabían bien.  Pero de cualquier manera, la idea de que debido a la creciente población humana y cada vez menos recursos tal vez debamos incorporar insectos a nuestra dietas no me agrada mucho. Y creo que esta mentalidad se debe en parte por mi crianza y mis costumbres, pero estoy consciente de que añadirlos a nuestra lista del supermercado, tarde o temprano, será lo mejor para la supervivencia de todos.

Según estudios recientes de las Naciones Unidas la crianza y consumo de insectos es una de las mejores opciones para no sólo para subsistir sino también para reducir la contaminación y para que millones no mueran por desnutrición. De los siete billones de personas que viven en el planeta en la actualidad dos billones consumen insectos, arácnidos y artrópodos en sus dietas regulares, y alrededor de un billón de persona sufre de malnutrición y hambre. Estos no tienen acceso a ningún tipo de alimentos ricos en vitaminas ni minerales, ni a insectos, que podrían ser una alternativa económica y eficiente a la falta de comida común.

Incorporar la entomofagia en nuestras vidas quizá sea al comienzo una cuestión de voluntad, un cambio de mentalidad con un factor de pragmatismo; pero para las generaciones futuras tal vez esta sea la única opción para poder subsistir pues las estadísticas estiman que para el 2050 alrededor de dos billones de personas sufrirán de hambre.  Se calcula que la población mundial será entonces de 9 billones y que tendremos que producir casi el doble de alimentos, teniendo en cuenta que parte de lo que se cultiva se utilizará para alimentar los animales que comeremos también, por lo que se necesitará de muchísimos recursos, energía y tierra, y esto provocará un montón de contaminación ambiental. Mientras que criar insectos requiere menos recursos, energía y espacio, y produciría menos gases de invernadero y daños al ecosistema.

Actualmente casi 70% de las personas no consumen insectos y le tienen una repulsión muy grande a la entomofagia y puede que se demoren mucho en cambiar sus hábitos alimenticios y aceptar esta idea. Históricamente con la occidentalización de la dietas y la culturas en menos lugares se consumen insectos. En los Estados Unidos por ejemplo varias tribus nativas consumían insectos pero esta práctica fue desalentada, menospreciada y suprimida por los blancos. Así mismo más recientemente en África, en Mali, muchos niños y personas se valían de saltamontes para complementar sus dietas y obtener proteínas, sin embargo desde el 2010 empresas occidentales que cultivan algodón comenzaron a rociar las plantaciones con pesticidas matando los insectos y prohibiendo a las personas consumir los pocos que quedaban por temor a envenenamiento. Ignorando completamente la importancia que los saltamontes tenía en la dieta de estas personas y obviamente sin substituir la perdida de los saltamontes con nada.

Si en el futuro una libra de pollo costará $18 y una de orugas $7, créanme que yo estaré consumiendo la oruga, que por cierto dicen sabe muy bien y es nutritiva. Sin embargo, yo preferiría explorar la posibilidad de consumir insectos, arácnidos y artrópodos mucho antes de que la inflación llegue a esos niveles por las terribles circunstancias de pobreza y falta de recursos a nivel mundial, producto de nuestro egoísmo, inflexibilidad y por no tomar medidas preventivas a tiempo. De cualquier manera según análisis alimenticios todos en el mundo ya estamos consumiendo insectos sin saberlo, pues muchos vegetales frescos y enlatados contienen fragmentos de insectos e incluso insectos enteros. Así que qué más da. Bon Appétit!
















viernes, 14 de junio de 2013

Información, privacidad, tecnología e informantes



 
El tema de la privacidad y seguridad nacional es muy delicado y tal vez tan complejo como la frase que el ex-secretario de defensa de los Estados Unidos, Donald Rumsfeld, alguna vez usó: “Hay cosas que sabemos que sabemos. También sabemos que hay hechos desconocidos conocidos; es decir, sabemos que hay algunas cosas que no sabemos. Pero hay también hechos desconocidos que desconocemos, aquellos que no sabemos que no sabemos”.

En pocas palabras, mientras más información uno pueda obtener de alguien o algo, más control se puede tener sobre la situación y esto brinda ventajas. No conocer algo es una desventaja y un peligro, y de una forma Rumsfeld se refería a eso con la última parte de la frase. En el caso del gobierno, es imperativo para este velar por la seguridad nacional y por lo tanto se vale de varios métodos para obtener y administrar todo tipo de información y descubrir lo impensable. El problema surge cuando los ciudadanos dudan sobre en qué se está usando realmente esta información y qué tan efectivos y beneficiosos son para la sociedad estos métodos de recolección de inteligencia.

También queda la duda de si hay transparencia en las acciones o resultados obtenidos. No habría problema si el gobierno fuese una entidad indepen diente e incorruptible, el problema radica en que “el gobierno” está compuesto por seres humanos con virtudes y fallas, y muchas veces estas personas pueden estar ligadas a intereses de grupos o tener su propia agenda.

Los medios de comunicación y los informantes a través de la historia han servido para crear un balance y para controlar las actividades del gobierno y sus subcontratistas, y esto ha servido para enmendar leyes, provocar cambios y analizar más detenidamente el rol de ciertas estipulaciones y gobernantes. Asímismo para revisar y regular la seguridad nacional, el espionaje, control de tecnologías y los derechos y libertades de las personas. Por lo que no es del todo malo tener este tipo de “vigilantes” y diseminación de información. Sin embargo, es nuestro deber como seres humanos, residentes y ciudadanos demostrar nuestra postura con respecto a estos acontecimientos y hacer valer y respetar los derechos y libertades que creemos son indispensables para nosotros. 

Mark Felt, quien fue agente del FBI, invoca las dos caras de la moneda: la de denunciar al gobierno como informante filtrando información a periodistas, y la de procurar seguridad nacional como parte del gobierno. Por un lado Mark Felt desenmascaró las actividades del Presidente Richard Nixon en el escándalo de Watergate, por lo que se lo conoció como “garganta profunda”. Por el otro, tiempo después Mark Felt ordenó allanamientos ilícitos a una casa de activistas que se creían relacionados a la organización Weather Underground, violando así los derechos civiles de estas personas. 
 
Felt dijo: “No reaccionar en contra de estas personas y saber de los bombardeos de antemano sería simplemente poner los dedos en los oídos para proteger los tímpanos mientras la explosión ocurre y luego comenzar la investigación”. Al mismo tiempo admitió que quizá él era un “chivo expiatorio” para la agencia, demostrando así que quien tiene toda la información, tiene el poder.

De cualquier manera Felt justificó sus acciones pues para él moralmente protegían a la mayoría o lograban el bien superior. Y es aquí donde se entra en el tema ético si el fin realmente justifica los medios, y pues por supuesto habrá siempre mentes maquiavélicas que dirán que sí sin importar las circunstancias, mientras otros se opondrán, creando así un balance y control orgánico.

En este mundo que es tecnológicamente más complejo y avanzado que antes, la línea que divide la privacidad y derechos de las personas y la que vela por la seguridad nacional y la prosperidad al parecer es más gris y borrosa que nunca, pero así mismo ahora contamos con más fuerza y rapidez para alzar nuestras voces y luchar por lo que creemos justo y ético para nosotros y para otros. Este tema es muy complejo y por eso mismo debe ser analizado y vigilado detalladamente, y ahora tenemos esa oportunidad.

jueves, 13 de junio de 2013

Volver a la Isla






















Puedo resucitar la isla,
traerla a mi memoria;
raíces por debajo del agua
crecen como manos cubiertas
de anillos de esmeraldas.

Recuerdo el papel crepe,
turquesa y delicado de sus aguas,
y pececillos de colores
nadando concupiscentes
hasta orillas templadas.

Manglares abriéndose paso
entre las olas…
En sus copas de racimos verdes
como tulipanes de algodón
se posan garzas
y gaviotas.

Quiero volver a la isla
donde la gente se ama en sus playas,
no sobre la arena tibia y placentera
sino entre la cadencia de mareas cálidas.

Donde hay tulipanes que vuelan
alargando y emancipando sus alas,
cortando el calor del aire
con ternuras geométricas
y proezas extrañas. 

                
 ~
En un lugar del Caribe 
Daisy Novoa Vásquez

domingo, 9 de junio de 2013

Turista en Tierra Propia

El buen clima está aquí y las oportunidades que nos brinda para disfrutar de unas buenas vacaciones son abundantes; sin embargo, muchas veces cuando pensamos en la palabra “vacación” de inmediato visualizamos un lugar exótico lejos de casa y en seguida se revienta la burbuja de ese sueño al recordar que todo cuesta mucho dinero. Pero la verdad es que uno puede disfrutar de vacaciones largas o mini-vacaciones cerca de casa sin gastar demasiado y haciendo las mismas cosas que miles de personas han venido desde muy lejos a hacer aquí. A veces subestimamos los lugares turísticos y atracciones locales pero  Massachusetts es un estado muy rico históricamente hablando y vale la pena explorarlo en detalle.


Aquí en Massachusetts disfrutamos de una variedad de paisajes, al igual que de ciudades interesantes y pintorescas. Massachusetts se conoce como la “Cuna de la Historia Norteamericana” pues los Peregrinos llegaron al suelo norteamericano en 1620 asentándose primero aquí. Comenzando por la capital del estado, en Boston hay una infinidad de museos (MFA, Fogg Museum, Gardner Museum, ICA, Museum of Science, Boston Children’s Museum y Kennedy Library Museum, entre otros) y parques que conocer. Al igual que innumerables atracciones turísticas como el Freedom Trail (el Camino de la Libertad) marcado por ladrillos rojos con alrededor de 2.5 millas que avanzan por lugares históricos de la revolución, la casa del patriota Paul Revere en el North End, el New England Aquarium, el observatorio “Skywalk” en el Prudential Tower, el Codzilla para los que quieren disfrutar de la velocidad en las aguas de Boston, y los Duck Tours entre otros atractivos. 

De la misma manera en ciudades aledañas, como Brookline está la casa donde nació John F. Kennedy. Miles de personas cuando visitan Dallas, TX van a ver la calle donde el ex-presidente americano fue asesinado; esta es una calle sin nada en especial. Estando aquí en Massachusetts por qué no ir a ver el lugar de nacimiento de esta importante figura histórica. En Cambridge uno puede explorar la Universidad de Harvard con guías que le explican a los visitantes la historia y leyendas de la institución, o simplemente usted puede caminar solo por el patio de la institución. Miles de turistas realizan este tour que es considerado “sagrado” cuando se visita el área. En el patio de Harvard se hace fila para frotar el brillante zapato de la estatua de bronce que representa a John Harvard, a la que los estudiantes llaman “la estatua de las tres mentiras”.

 
Yéndonos un poco más lejos uno puede explorar Plimoth Plantation donde desembarcaron los primeros peregrinos. La pequeña ciudad es muy atractiva y si uno quiere experimentar el pasado puede visitar “La Aldea del Siglo 17”, donde se recrea cómo vivía la gente en 1627. Esta es una experiencia enriquecedora e interesante para personas de cualquier edad.
También uno puede visitar la reserva de los Wampanoag, donde verdaderos nativos representan la forma de vida de sus antepasados. También uno puede subirse al barco Mayflower II y visitar muchos atractivos más investigando de antemano o en los sitios de información al turística de cada lugar.
Salem es otra ciudad interesante pues cuenta con excursiones relacionadas a los históricos juicios de brujería que se dieron en 1692, además de rutas con vistas preciosas, y el fabuloso Salem Maritime, un lugar histórico con bellas muestras del mundo de la navegación.

Si se divide a Massachusetts en secciones se podría hablar del Norte, del valle de Merrimack, del Sur, Cape Cod, Martha’s Vineyard y Nantucket, de Massachusetts Central y del Oeste. Todas estas regiones cuentan con lugares bellísimos y vale la pena que usted considere visitar algunas de las siguientes áreas si aún no lo ha hecho: Quincy, Gloucester, Concord, Ipswich, Rockport, New Bedford, Duxbury, Westport, Eastham, Edgartown, Worcester, Sturbridge, Princeton, Northampton, Deerfield, y Stockbridge en la región de los Berkshires. Este verano es una oportunidad para visitar una de estas ciudades pues todas son joyas de Nueva Inglaterra. Algunas con museos interesantes, playas, parques nacionales, recreaciones para toda la familia y excelentes restaurantes.

Los beneficios de tomarse unas vacaciones en nuestro propio estado es que se ayuda a la economía local y a nuestro propio bolsillo. Además, no conocer el lugar donde uno vive es casi como tener una casa grande y no entrar en todos sus cuartos.