Varios
argumentaron que Guatemala había dado un paso histórico y único con
respecto a los Derechos Humanos tras condenar luego de 30 años al ex-dictador Efraín Ríos Montt pero la celebración fue corta pues la Corte de
Constitucionalidad de Guatemala decidió el lunes 20 de Mayo anular la sentencia
de 80 años de prisión contra Ríos Montt. Así los guatemaltecos vuelven a
incursionar en litigios, a seguir abriendo heridas, y potencialmente a
dividirse.
El
10 de mayo de este año un anciano Ríos Montt fue condenado a 80 años en
prisión por crímenes de genocidio, siendo esta la primera vez que un
ex-gobernante guatemalteco era encontrado culpable del cargo. Además
Ríos Montt se convirtió en el primer líder latinoamericano, y uno de los
pocos en el mundo, en ser condenado por crímenes contra la humanidad.
Sin embargo, la sentencia que fue celebrada por la mayoría del pueblo
guatemalteco duró muy poco pues en una decisión dividida, tres a dos,
los magistrados del máximo tribunal de Guatemala resolvieron a favor de
Ríos Montt botando los cargos. El fallo de la Corte de
Constitucionalidad (CC) fue dado en la noche del lunes 20 de mayo
después de unas 10 horas de debate entre los cinco magistrados.
El
apoyo que algunos habían mostrado a Ríos Montt causó indignación y
alarma especialmente entre la población indígena del país que fue
mayormente afectada durante el gobierno de 17 meses de Ríos Montt entre
1982 y 1983. Desde enero de 2012 Efraín Ríos Montt apareció en las
cortes guatemaltecas y en el proceso se lo trató por miles de muertes,
violaciones y desplazamientos indígenas. Finalmente el 10 de mayo Ríos
Montt fue encontrado culpable de que durante su régimen de facto se
mataran a 1,771 indígenas y se desplazaran a casi 30,000 más. Pero tras
la decisión del CC la justicia que tantos pensaban que se había
alcanzado se ve cada vez más lejos y débil.
Amnistía
Internacional (AI) condenó la anulación de la sentencia contra el
ex-dictador Ríos Montt y la tildaron de “un golpe devastador para las
víctimas”.
El
ex-dictador guatemalteco Efraín Ríos Montt irá de nuevo a juicio, la CC
ordenó que este regrese al punto en que quedó el 19 de abril, cuando
una Sala de Apelaciones ordenó suspenderlo al acoger un amparo de la
defensa de Ríos Montt. Los que están a favor del líder, sienten que la
justicia está ahora de su lado y tienen una nueva oportunidad.
Durante
todo este proceso fuertes discusiones se han dado entre grupos de
derecha, militares, y empresarios quienes mantienen la inocencia de Ríos
Montt y niegan que hubo genocidio, mientras que grupos sociales,
académicos y activistas humanitarios exigen que se reconozca que se
cometieron crímenes contra la humanidad, y esperan que la justicia este
nuevamente de su lado.
Todo
este proceso ha demostrado que la reconciliación en Guatemala aún es un
tema delicado; sin embargo, ya que no ha habido levantamientos y todo
ha transcurrido en relativa paz hasta la fecha se demuestra que aunque
se siguen reviviendo heridas de la guerra civil (1960 -1996), la gente
guatemalteca hasta el momento ha sabido valerse de sus leyes y su corte
en vez de acudir a la violencia.
Sin
embargo, ahora que el Ríos Montt irá nuevamente a corte si los
resultados no son los remotamente esperados por la gran mayoría, no
sería sorpresivo para nadie si el pueblo guatemalteco acude a las
manifestaciones e incluso a la violencia para alcanzar la justicia con
sus propias manos. La realidad es que se ha abierto y exaltado una
herida que llevaba cerrada más de 30 años, si algo no se hace para
calmar tanto dolor y apaciguar la polarización del pueblo guatemalteco,
no sería sorpresivo que este proceso judicial en vez de terminar siendo
beneficioso para la mayoría, sólo le cueste a Guatemala seguir
retrocediendo y dividiéndose.
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